Si, así me paso todo el día, ‘mandingas fuera‘, es la comida de La Pulgui, y aunque aguanta entre toma y toma unas dos horas, aveces menos, y si se duerme aguanta más, yo intento darle el pecho antes de salir de casa, ahora que Paula tiene dos meses y poco, ya nos vamos creando un día a día, y nos vamos ‘conociendo‘…

Cuando digo conociendo, lo digo en todos los sentidos, y PAPArracho se sorprende (y yo creo que hasta le da un poco de rabia jijijiji…), por que le voy pillando el punto a los lloros de Paula, voy conociendo cuando son lloros de ‘quiero bracitooooooo‘, lloros de ‘no me puedo dormiiiiiiiiiiiiir cógeme y acunameeeeeeeeee‘, lloros de ‘tengo un pedo atravesaóóóóóóóó’ lloros de ‘vamonos a la calleeeeeeee‘, lloros de ‘tengo hambreeeeeee‘, aunque este último lloro no le tengo pillado el punto del todo, porque aunque hay sesión de mandingas cada dos horas, aveces está mamando y se queda sopa, o no mama con la misma intensidad, así que la tía cachonda, a la media hora me vuelve a pedir otra vez, y ya os imagináis, mandingas fuera again…

Aquí la menda no tiene ningún problema en sacarse la teta allá donde le pille, (la foto es momento cafetería), Paula tiene barra libre estemos donde estemos, y estemos con quien estemos, (quien me lo iba a decir antes de ser mamá, decía que nanai de la china, que yo no me sacaba la teta en ningún sitio, eso me pasa por bocazas, a la otra vuelvo :D), lo veo totalmente natural, un regalo que te da la naturaleza, el que tu bebé crezca gracias a algo que tu produces, el vínculo que se crea, el que dependa de ti y tu de él, (por que tela marinera cuando tienes las mandingas llenas de leche, y necesitas que te las vacíe), como ya hicieron nuestras madres, y anteriormente a ellas, nuestras abuelas, y la verdad, veo que es una pena, que cada vez esta no se si llamarlo ‘¿tradición?‘, se va perdiendo, aunque esto de teta vs biberón da para otro post, (o tres o cuatro), cuando veo a una mamá que está dando de mamar a su retoño, me sale una sonrisilla en plan, ‘que estampa más bonita…‘

Desde aquí invito a todas las lectoras de este blog que estén embarazadas y tengan dudas de si darle el pecho o no, (como me pasó a mi en mi embarazo, que ya os conté en este post, tenía dudas, y ahora miradme, una ‘loca de la teta‘, fue más por desconocimiento que por otra cosa), a que lo hagáis, a que lo intentéis, (otra cosa es que no podáis por los motivos que sean), es una de las experiencias más bonitas que se le pueda brindar a una mujer, informaros, acudir a talleres donde profesionales os puedan asesorar, hablar con amigas que si hayan amamantado a sus bebés, y no dejéis pasar la oportunidad de probarlo, seguro que después, estaréis tan encantadas como yo de estar todo el día con ¡las mandingas fuera! por vuestr@ pequeñ@.

¿Y vosotras, os sacáis las mandingas allá donde estéis?, ¿os da ‘no se qué’ sacaros la teta?, este tema lactancia, tiene mucha tela, lo se… Así que ¡contar, contar!