Juegaterapia, El Jardín de mi Hospi, en La Fe de Valencia
Hace unos días la guerrera Batusi nos dio un susto de los grandes, se cayó del columpio de espaldas con la mala suerte que lo primero que tocó el suelo fue su cabeza, el cogote concretamente, en un principio podría haber quedado en el berrinche con motivo de la caída sin más importancia que la de un chichón, pero el susto gordo nos llegó al rato cuando estando en casa tan tranquilos empezó a no recordar las cosas que habían pasado ese día, se nos pusieron de corbata y nos fuimos cagando leches al hospital de urgencias.