Vistiendo el dormitorio bonito, con la ropa de cama de Burrito Blanco

La ropa de cama tanto para nosotros, como para nuestros hijos es algo que como decoradora de interiores miro MUCHÍSIMO, es un tema que en algunas etapas de mi vida me ha obsesionado bastante (como en los dos embarazos, donde me dio por renovar TO-DOS  los textiles de la casa), y dirás, ¡qué exagerada Núria!, pues quizá si, pero me gusta que cuando me acuesto a dormir, además de vestir el dormitorio bonito estéticamente, me gusta que la ropa que me cubra sea suave, cálida, blandita y que me ofrezca calidad, son muchas horas las que pasamos durmiendo, y créeme que se nota mucho de unas calidades a otras.

Descubrí Burrito Blanco hace un tiempo ya, y fue gracias a una colaboración que hicimos juntos, el resultado de sus productos es una auténtica pasada, el lavado es una maravilla, tanto es así que he repetido sin dudarlo, hemos incorporado en nuestra habitación una nueva funda nórdica 100% algodón de 200 hilos, una delicia al tacto, ¿sabes esa sensación de que se adapta perfectamente a tus movimientos cuando estás en la cama?, no rasca nada.

Otra de las cosas que me gustó es que ¡no pesa!, esto no es ninguna tontería, ¡no soporto los textiles que pesan!, me ha pasado en más de una ocasión cuando hemos ido de viaje y nos hemos alojado en hoteles o casas rurales, que no he dormido del todo bien por lo mucho que pesan las fundas nórdicas o las colchas de cama, como dice mi madre, «las manías no las curan los médicos…».

Este juego de ropa de cama es completo, funda nórdica, 2 almohadas de 50 x 85 cm, y una sábana bajera ajustable, además mola mil porque es reversible, así que la puedes poner blanca y al darle la vuelta a la parte alta de la cama se ve el estampado color piedra, que además de elegante y bonito, luce y aporta relajación.

El tema de la relajación en el dormitorio es una premisa importantísima, cuando estudiaba interiorismo, una de las profesoras nos decía que el dormitorio es donde vamos a pasar el 33% de nuestra vida, donde el descanso tiene que ser vital, se tiene que respirar armonía, paz, calma… para mi un dormitorio es la habitación más difícil de decorar, porque tiene que dar la sensación de hogar desde el minuto 1 que empiezas a darle forma con los muebles, y con los colores de las paredes.

Estudié mucho la colorterapia cuando hicimos la reforma integral de nuestro ático, es alucinante ver lo mucho que influye cada color en cada persona, y esto cuando se trata de un espacio donde van a dormir dos personas no es tarea fácil, los colores neutros son los más relajantes, tanto en paredes, como en muebles, como en textiles (cortinas, alfombras, mantas, y por supuesto fundas nórdicas o colchas).

Sin más, te dejo con la colección de textiles de nuestro dormitorio, bueno, nuestro y de Cofi, que sin duda se adueña de parte de la cama sin dudarlo, y con algunas pinceladas de la deco, espero que te guste 🙂

Ropa de cama: Burrito Blanco (puedes verla aquí)

¿Qué te ha parecido (parte) de nuestro dormitorio?, ¿y la funda nórdica?, es una chulada, a mi me tiene in love… ¿conocías Burrito Blanco?, te recomiendo que eches un ojo a su web, tiene productos preciosos, y la calidad no te va a defraudar 😉