Diez días después, del día más feliz de nuestras vidas, hago un pequeño balance de lo que hasta ahora conozco como la maternidad.

Cualquier cosa nueva que vamos experimentando nos resulta de lo más divertido, curioso y también en algunos casos, nos crea cierta duda de saber si esto o lo otro, será o no normal, como muchos padres primerizos, imagino, los cambios de pañal, los baños del bebé, el eruptito de después de las tomas…

Estamos en una filosofía «happy flower power» que tira pa’tras, y es que queremos disfrutar lo tanto, y cada segundo de nuestra pequeña Batusi, que no nos vale la pena enfadarnos ni un segundo, (bueno, alguna nochecita que a la niña le da por llorar como si la estuvieran matando, y su madre se cabrea, no cuenta… :D), y es que hasta por las noches, ya sea la hora que sea y con un sueño de querer morir, me sale la sonrisilla tonta de ‘Ay mi pelailla que guapa es…’

Lo cierto es que estamos teniendo mucha suerte con lo del tema de dormir y de los lloros a mitad noche, y es que me toca despertar a Batusi para amamantarla, entre toma y toma no dejo que pase más de 3 horas y media, (aunque en el hospital nos dijeran 4), me gustaría saber hasta cuantas horas sería capaz de dormir si su mami no la despertara para comer, parece que hiberna oye…

Y claro, sin abandonar la cosa del dormir, agotaica me tiene con esto de dormirse cuando le estoy dando el pecho, ¡buff!, si tuviera que decir algo que me pone un pelín nerviosita, sin duda es este, que la tía se me queda frita en las tomas, ¡y que no hay manera eh!, te dicen «Tienes que molestarles», ah… Vale, vale, ¿y me puede decir como se hace eso por favor?, por qué vamos…

Le toco los pies, y los encoge hasta arriba, pero nada, le muevo un poco la cabecita, pega dos o tres succiones, y nada, sigue a la suya, soñando con los angelitos, hago circulitos con mi mano por su espalda, que parece ser no le gusta nada, y esto es lo que más le suele activar, ¡pero no os vayáis a pensar!, un par de minutos, no sea cosa que su mami se emocione y succione sin parar… 😀

Otro tema que me tiene pelín mosca es el del hipo, la pobre lo tiene cada dos por tres y claro, le cuesta dormirse, me da una penita cuando la veo ahí, ‘Hip, hip, hip…‘, si para nosotros es molesto, imaginaros para ellos, que no pueden hacer los famosos truquillos caseros de la abuela, ni dar siete tragos de agua, ni oler miga de pan, ni aguantar la respiración contando hasta diez… O_o
He leído que es muy común el hipo en los bebés, en la mayoría de los casos es por que se quedan llenos, y que una buena forma de eliminar lo, es dándole un poco más, (contradictorio lo se), pero el que coman, hace trabajar al intestino, y esto provoca que se les vaya.

Balance de estos 10 primeros dias de Batusi, sin duda positivísimo, hace que se me olvide el dolorcillo de la cesárea, que sus papis (más su mami…), vaya zombi por la vida, y que tanto PAPArracho como yo, hayamos conocido gracias a ella, el auténtico y verdadero amor incondicional, y lo mejor de todo señoras, es que esto ¡sólo acaba de comenzar!